Considerando que la industria de las carnes se posiciona como el cuarto sector exportador de alimentos de Chile, donde el 62% del total corresponde a carne de cerdo, por lo que se trata de un sector que sin duda influye de forma importante en la economía y el desarrollo  del país. Hoy en día son más de 12.000 personas  las que trabajan de manera directa y 10.000 indirecta en el sector, principalmente en las áreas rurales de las regiones Metropolitana, O´Higgins y el Maule. Es una industria que además trabaja con alrededor de 9.000 empresas proveedoras, de las cuales el 68% son pymes, y tienen un impacto directo en más de 100.000 personas y sus familias.

Un sector que se destaca por invertir de forma permanente en la adquisición y adaptación de tecnologías de primer nivel para cumplir con las exigencias -tanto chilenas como de los países de destino- buscando no afectar el entorno ni los recursos naturales. Es así que en la última década, la industria ha realizado una serie de acciones con el fin de mitigar y reducir olores, mediante tecnologías enfocadas en el tratamiento de los purines generados en los planteles.

Dichas acciones han tenido efectos positivos, como lo es la reducción de un 32% de las emisiones de gases de efecto invernadero en el período 2000-2018 y  que a la fecha más de un 65% de los purines sean tratados en sistemas de tratamiento avanzados como los son las tecnologías de lodos activados, lombrifiltros y biodigestores. Según indica Daniela Álvarez, Subgerente de Sostenibilidad de la Asociación de Exportadores de Carnes de Chile, ChileCarne: El sector porcino nacional ha avanzado notablemente en tecnologías y mejoras en los últimos 10 años, lo cual nos hace estar muy bien posicionados en los mercados internacionales, en donde competimos fuertemente con productos provenientes de Brasil, Estados Unidos, España, Dinamarca y otros países de Europa ”.

Una Norma realista: Cumplir con los objetivos y mantener la sustentabilidad del negocio

El pasado 22 de julio de 2020 se publicó en el Diario Oficial el anteproyecto de la primera norma ambiental de olores que habrá en Chile: la Norma de Emisión de Contaminantes en Planteles Porcinos, la cual busca proteger la salud de la población y mejorar su calidad de vida, previniendo y controlando la emisión de sustancias odoríficas desde planteles de cerdos. Según se indica en el anteproyecto, se trata de la primera normativa que busca regular la emisión de olores  en el país.

El Ministerio de Medio Ambiente abrió en diciembre pasado un proceso de consulta ciudadana por este anteproyecto, la cual estará vigente hasta el 12 de marzo de 2021. Adicionalmente, se han generado una serie de instancias (talleres, webinars y mesas de diálogo) con el objetivo de que todas las partes involucradas puedan debatir y reflexionar acerca de la propuesta de anteproyecto vigente.

Daniela Álvarez, quien ha participado de varios de los eventos en cuestión señala “Es muy importante el que se hayan dado estas instancias de diálogo, porque sin duda la invitación del Ministerio es a realizar de un proceso normativo ampliado, recogiendo todas las experiencias que permitan enriquecer el anteproyecto”.

El pasado 12 de enero, el Ministerio de Medio Ambiente organizó un webinar con  expertos  de la Academia, en el que participaron: Ingrid Rebolledo, directora de innovación y vinculación con el medio de la Universidad INACAP, el profesor Germán Aroca, especialista en el manejo de olores de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, y Rolando Chamy, Director del Núcleo de biotecnología Curauma, quienes fueron consultados en relación a los pros y contras observados respecto del anteproyecto y quienes destacaron la necesidad de contar con normativas de este tipo.

Sin embargo, dejaron en evidencia falencias que aún persisten y donde la ciencia aún está al debe, a fin de que puedan desarrollarse métodos directos de medición de olores que hoy no existen, que aporten mayor claridad a las estimaciones de efectividad de las tecnologías y tratamientos. Asimismo, resaltaron la necesidad de la educación ambiental a las comunidades debido a lo complejo que resulta el entendimiento de estas materias y lo novedoso de esta primera normativa en desarrollo.

Eficaz modelo de producción porcino danés sectoriza los sectores rurales y urbanos según “categorías de molestias por olores”

Otra instancia interesante fue la mesa de diálogo organizada en noviembre pasado por la embajada Danesa en Chile. En dicha ocasión fue presentado el modelo de producción porcino danés debido a la eficacia de su producción, gestión y de su manejo en la materia.  El expositor principal fue el experto en producción porcina danesa, Peter Nygaard, quien resaltó que Dinamarca tiene una de las principales producciones porcinas del mundo en términos de superficie y densidad poblacional, y que la producción se lleva a cabo en relativamente pocos planteles de gran tamaño.

De acuerdo a lo presentado, la norma Danesa establece límites a las molestias por olores que van desde las 5, 7 a las 15 OUE por m3, dependiendo de la categoría o área donde se emplacen las viviendas (urbana/intermedia/rural). Asimismo se indicó que en mayor o menor medida, siempre habrá olores asociados a la producción ganadera. “En Dinamarca, la práctica es considerar estos sectores como zona agrícola y, por lo tanto, sus residentes deben aceptar algunas de las desventajas que puede significar el ser vecino de un plantel. Así, los habitantes de las zonas rurales deben tolerar más olores de la actividad ganadera que los habitantes de las zonas urbanas. Es precisamente por esto que se han introducido diferentes categorías de molestias por olores en Dinamarca, por lo que se aplican diferentes requisitos de olores según la densidad residencial del área”, dijo Nygaard.

En relación a ello Alvarez señaló, “Dinamarca es un líder reconocido en producción porcina internacional y en sostenibilidad, entonces es muy interesante poder conocer de primera fuente cómo opera la normativa de olores en dicho país. Me parece acertada una regulación con límites diferenciados por zonas, reconociendo las diferentes densidades poblacionales y la vocación de los territorios”. Finalmente, señaló “el sector porcino ya está haciendo frente a la demanda con las inversiones y tecnología implementadas en la última década. Para seguir avanzando esperamos contar con una norma a la brevedad posible que dé certezas a todas las partes interesadas”.

INFOGRAFÍA 1: En Chile y de acuerdo a la información catastrada por ASPROCER, existen 83 planteles porcinos a los cuáles se les aplicaría la regulación a lo largo del país. Un 52% de ellos está en la Región del Libertador General Bernardo O’Higgins y un 25% en la Región Metropolitana.

INFOGRAFÍA 2: Cifras comparativas de la producción porcina en Chile y Dinamarca:

Chile Dinamarca

 

Cerdos vivos 2,7 millones 13 millones

 

Cerdos para faena producidos cada año 9,5 millones

 

27 millones
Producción porcina anual 600.000 tons 1.600.000 tons

 

Superficie total 756.950 km2 42.933 km2

 

Población (habitantes) 18,7 millones 5,7 millones